miércoles, 17 de noviembre de 2010

Que piolas somos…

Nuestros empleados públicos (los votados y los no votados) pretenden engañarnos con procedimientos autoritarios, tergiversando argumentos, falseando índices y desestabilizando nuestra democracia. ¿Y nosotros –asfixiados por el creciente costo de vida- seguiremos tolerando en silencio?


Por el Ing. Roberto Fernández Blanco
 
El irresponsable, perverso y desaforado Gasto Público (que incluye la corrupción gubernamental, los contratos para los amigos, los planes “copar la calle”, los digitados subsidios, el incremento de la deuda pública, etc.) generado por el hasta ahora dúo presidencial, no lo pagan ellos sino que lo pagamos -de manera subrepticia- todos los ciudadanos del sufrido pueblo argentino cualquiera sea nuestra condición social (rico, pobre o indigente). ¿Cómo lo pagamos? Con pérdida creciente en nuestro nivel de vida.
   
Para ello, a la par que expresan su hipócrita preocupación por los pobres y hablan de Justicia Social, la actual mandataria y sus funcionarios siguen haciendo imprimir dinero (inflación monetaria) para hacernos pagar dicho Gasto Público a través del aumento generalizado de los precios (inflación de precios) provocado por la inundación de todo ese dinero inyectado en nuestra economía.
    
Por añadidura, nuestros empleados públicos (los votados y los no votados) pretenden engañarnos con procedimientos autoritarios, tergiversando argumentos, falseando índices y desestabilizando nuestra democracia. ¿Y nosotros –asfixiados por el creciente costo de vida- seguiremos tolerando en silencio?
   
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