Comenzó la cuenta regresiva

El Gobernador Hermes Binner, mientras resuelve qué hacer con el presente Griego de la Boleta Única, ya puso a plazo fijo su mandato y comenzó la cuenta regresiva al develar la incógnita preanunciada en junio por este Diario.


Por Darío H. Schueri – Desde Santa Fe

El Gobernador Hermes Binner, mientras resuelve qué hacer con el presente Griego de la Boleta Única (a la que quisiera aplicar también para las primarias), ya puso a plazo fijo su mandato y comenzó la cuenta regresiva (por eso lo postuló a Bonfatti) al develar la incógnita preanunciada en junio por este Diario: el anteúltimo domingo de Julio del 2011 serán las elecciones generales, el anteúltimo domingo de Mayo las primarias y en plena vacaciones, el 21 de febrero el cierre de listas.

El Presidente del Partido Justicialista de Santa Fe y precandidato a Gobernador del doliente Peronismo Federal, Ricardo Spinozzi tuvo que salir, presuroso, a desmentir que hubiere propiciado una posible fórmula entre la Presidente Cristina Fernández y el senador Carlos Reutemann tras un reportaje dado a una radio rosarina.

De inmediato, el portal de la Radio desgrabó el reportaje y le endosó a Spinozzi haber declarado que “no hay que descartar ningún rumor de la agenda" hacia 2011, cuando le preguntaron sobre un comentario que había publicado el Diario El Cronista Comercial que abonaba la fórmula Cristina Fernández - Reutemann. El resto de los portales de Internet, entre ellos el porteño Infobae, se hicieron eco de las supuestas afirmaciones de Spinozzi, a manera de interpretación del pensamiento del Lole, ya que según esos Medios el senador santafesino es un “allegado” a Reutemann y bien podría haber actuado a manera de vocero oficioso del senador nacional.

Spinozzi mas tarde en una emisora de esta capital cortó de cuajo: “no veo la posibilidad de una fórmula Cristina – Reutemann, no me lo imagino (..) nunca lo imaginé como compañero de fórmula de nadie: no tengo ningún dato y no veo ninguna posibilidad de que eso ocurra”, aventó.

Ricardo Spinozzi está con doble jornada laboral por estos días; sumado a las extenuantes giras por los Departamentos entramando acuerdos políticos con referentes locales de cara a su precandidatura gubernamental, debe ocuparse de los delicados asuntos internos del Partido Justicialista que preside, pues una de sus líneas, la kirchnerista de Agustín Rossi propugna no ir a internas si el el reutemismo y el obeidismo no suscriben un documento de apoyo a la gestión de la Presidente Cristina Fernández, bajo la organicidad del Partido Justicialista de Santa Fe. Rossi piensa que no se pueden mechar listas definitivas tras una primaria, con postulantes que no apoyen el modelo nacional. Desde la otra vereda, Norberto Nicotra que apoya a Eduardo Duhalde, suscribe la misma doctrina de Rossi y por eso ya definió ir por afuera.

El primero en recoger el guante arrojado por el jefe de los diputados nacionales del FPV fue el diputado local obeidista Mario Lacava, en el convencimiento de que “a lo largo y ancho de toda la provincia afiliados, dirigentes, presidentes comunales e intendentes del partido nos piden que nos unamos para enfrentar juntos el proceso electoral”, acusando implícitamente al “Chivo” Rossi de “dividir el partido” y “debilitarlo de cara a la contienda electoral” por pretender que “todos los sectores internos acepten un mismo modo de pensar, un mismo liderazgo y una misma manera o método de construir política”; condición de “cumplimiento imposible”, obtura.

Spinozzi no se quedó atrás y arremetió también con un documento en el que hace notar que el planteo de Rossi “no suena muy democrático”, a la vez que le pidió “generosidad” y que no “antepongan los intereses personales o sectoriales”, señalando que le parece “apresurado pedirle al Partido Justicialista de Santa Fe o al congreso partidario que tome una definición” afirmó el titular del peronismo santafesino”. Rossi quiere convocar al Congreso partidario lo antes posible para que defina el apoyo explícito al modelo nacional.

A todo esto, el dirigente Alberto Maguid y su Partido Producción y Trabajo ratificaron la precandidatura de Rafael Bielsa a manera de “kirchnerista moderado”, propiciando primarias dentro del Partido Justicialista, pero a diferencias de Rossi, sin condicionamientos de apoyos manifiestos a la Presidente de la Nación.
Para completar el formulario de campaña, Bielsa espera que su otro mecenas político, Juan Carlos “Chueco” Mazzón, le confeccione copias de las llaves con las que Rossi abre - y cierra- puertas en los Ministerios nacionales en los cuales los Intendentes y Presidentes comunales peronistas- kirchneristas han dejado innumerables carpetas con pedidos que a medida que se acerca el final del año se transforman en súplicas desesperadas; sobremanera ante el avance arrollador de la interna radical-socialista que hará estragos en los distritos.

Hablando del Frente…

Luego de ver encuestas propias y ajenas, y la decidida vocación del intendente de Santa Fe Mario Barletta de competir por la gobernación, el Gobernador Binner decidió involucrarse de lleno en la contienda electoral por venir. De movida y sin cortapisas al cumplirse tres años de gobierno refrendó lo que venía insinuando con parábolas: Antonio Bonfatti es su candidato a Gobernador; garante, según sus propias palabras, de la “reelección del proyecto” (financiado por la Unión Europea).
Por otro lado, la ausencia de un candidato que asegure el triunfo sin taquicardias en la “capital del socialismo” (Binner dixit), sumada a la buena performance del actual intendente Miguel Lifschitz (un aliado en el frente interno socialista) desnudó la próxima jugada binnerista: convencer a “Miguel” de la necesidad de conservar el territorio ganado hace veinte años y que les posibilitó llegar a la Casa Gris. Lifhschitz apuntalaría desde Rosario la candidatura de Bonfatti ante el embate radical que apoya a Mario Barletta y las apetencias de Giustiniani.

La previsible reacción de Binner ante lo que consideraron una afrenta del radicalismo al pegar afiches con su imagen promocionando la candidatura de Barletta no se hizo esperar: el Gobernador, además de catapultar a su candidato Bonfatti, puso en estado balcánico al FPCyS al descalificar de plano la teoría radical de la rotación de Partidos en el Frente y la necesidad de que el próximo candidato sea Mario Barletta, quien dicho sea de paso postularía como candidato a Intendente de Rosario a Pablo Javkin y su jefe político Carlos Comi (ambos del ARI) como postulante a Vicegobernador.

Por lo pronto, antes de ocuparse del radicalismo (aunque la diputada Bertero junto al propio Bonfatti ya estén abocados a la prolija tarea de seducir radicales díscolos e independientes con pretensiones) Binner quiere tener una oportuna conversación con Lifschitz y Giustiniani para intentar galvanizar el frente socialista; tarea ímproba, pues Lifschitz no quiere renovar como Intendente de Rosario y Giustiniani quiere ser Gobernador.

Por lo pronto, el Gobernador, mientras resuelve qué hacer con el presente Griego de la Boleta Unica (a la que quisiera aplicar también para las primarias), ya puso a plazo fijo su mandato y comenzó la cuenta regresiva (por eso lo postuló a Bonfatti) al develar la incógnita preanunciada en junio por este Diario: el anteúltimo domingo de Julio del 2011 serán las elecciones generales, el anteúltimo domingo de Mayo las primarias y en plena vacaciones, el 21 de febrero el cierre de listas.

Favor avisar a las familias de los candidatos; porque tampoco habrá vacaciones de Julio.

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