viernes, 31 de mayo de 2019

EL PARO, ¿SIRVE?


¿Se consiguió algo concreto? Si. Los trabajadores no pudieron ir a trabajar, el país perdió cifras millonarias, la Argentina toda es más pobre que antes del paro. ¿Eso será una satisfacción sindical?

Por Malú Kikuchi

El miércoles 29/5, la Argentina soportó un paro general. El 5º que le hace la CGT al gobierno de Macri, paralizando el transporte en todos sus rubros. Eso determina el éxito del paro. Los trabajadores no tienen por lo general medios de transporte propios, deben recurrir a los públicos.

Sin transporte público los trabajadores no pueden llegar a sus trabajos. Pierden el presentismo. Y el país perdió $40.800 millones, debido al paro, dijo Dante Sica. ¿Hay razones para decretar un paro? Sí. ¿Sirve para algo un paro? No. Sin diálogo con el gobierno solo irrita a los ciudadanos.

Hay un dato valioso que debe ser tomado en cuenta. A los gobiernos peronistas les han hecho paros generales. Pero, tres veces menos que a los gobiernos no peronistas. Haciendo cuentas precisas, desde 1983 hasta el día de hoy, se deben separar los años PJ de los años que no lo fueron.

Raúl Alfonsín, UCR, asumió el 10/12/1983, se fue el 8/7/1989.

Carlos Saúl Menem, PJ, 8/7/1989 hasta 10/12/1999.
Fernando De la Rúa, UCR, 10/12/1999 hasta 21/12/2001. 
*Eduardo Duhalde, PJ, 2/1/2002 hasta 25/5/2003. 
Néstor y Cristina Kirchner, PJ, desde el 25/5/2003 hasta 10/12/2015. 
Mauricio Macri, Cambiemos, desde el 10/12/2015 hasta hoy.

Haciendo una suma simple que incluye los meses gobernados, el PJ (en todas sus variantes, libertario con Menem, ortodoxo con Duhalde, seudo revolucionario con los K, llegan a 25 años justos. Los 3 presidentes no peronistas sumados con meses, llegan a 11 años. Menos de la mitad.

Son datos que se pasan por alto, pero que tienen una enorme relevancia. Si se habla específicamente de la provincia de Buenos Aires, desde 1987, en que Antonio Cafiero ganó la gobernación, y hasta el 10/12/2015, gobernó ininterrumpidamente el PJ. A Cafiero le siguió Eduardo Duhalde, Carlos Ruckauf, Felipe Solá y Daniel Scioli. 28 años de PJ bonaerense.

Ante tantos años de ser gobierno el PJ, se hace difícil achacar sólo a Cambiemos que lleva 42 meses en el poder, las culpas del descalabro argentino. El gobierno de Macri se equivocó y mucho. Pero las leyes, los conceptos y los paradigmas que enferman a la sociedad, no son su culpa.

Privatizaciones mal hechas, negociados turbios, deudas pagadas a medias y robos incalificables jalonaron los gobiernos peronistas. Legislaciones incumplibles, un sistema de coimas internalizado, el INDEC inexistente, relato en vez de verdades, todo eso ha llevado al país a la situación actual.

Los sindicalistas, la mayoría de ellos millonarios, incapaces de explicar sus riquezas ante una auditoría seria, saben que lo que defienden no son sólo los salarios de sus afiliados, primero defienden sus privilegios. Y apoyan al que los ampara y denigran al que los combate. Es la dictadura sindical.

Hugo Moyano apoyó a Néstor K, luego lo combatió. Hizo lo mismo con Cristina, la apoyó y terminó siendo su enemigo declarado apoyando a Macri en la elección del 2015. Ahora ataca a Macri y se recuesta en Cristina. O en la fórmula Fernández por dos. No es creíble. “Siempre es güeno tener palenque ande rascarse”, le decía el Viejo Vizcacha a Martín Fierro.

El paro del 29/5 se hizo mientras se negociaban las paritarias. Una contradicción formal. Es cansador repetir que las huelgas o paros generales o no, son un derecho constitucional (artículo 14), siempre que se trate de mejoras salariales o de las condiciones de trabajo. Los paros políticos no son legales. Este último, también fue un paro político.

Se dijo que Macri debía ser el último gobierno “neo” liberal (¿qué es el “neo” liberalismo? El liberalismo es uno, ni nuevo ni viejo, simplemente ES). Eso fue una declaración política. Se instó a votar por la dupla Fernández, eso también fue político. Y puede que no sea el último paro.

¿Se consiguió algo concreto? Si. Los trabajadores no pudieron ir a trabajar, el país perdió cifras millonarias, la Argentina toda es más pobre que antes del paro. ¿Eso será una satisfacción sindical? Para Moyano el paro fue un éxito. Hay diferentes acepciones para el significado de “éxito”.

Patricia Bullrich, ministra de seguridad de la Nación dijo el 29/5: “Estamos hartos de los paros”. Puede que se haya referido al gobierno. Pero la sociedad, los ciudadanos de a pie, también están hartos de los paros. No se han dado cuenta que los paros no los ayudan, ayudan al gobierno.


*Los presidentes comprendidos entre el 21/12/2001 y el 2/1/2002, todos PJ, no vale la pena nombrarlos.



jueves, 30 de mayo de 2019

¡BINGO! ESTA VEZ SÍ CREO TENER LA SOLUCIÓN



Acaso la solución a los problemas argentinos esté al alcance de la mano y no nos hemos dado cuenta. Increíble que ninguno se haya percatado. 

Por Carlos M. Reymundo Roberts

Pero, antes de decir cuál es, analicemos el devenir político de estos días. Sin exagerar, se viven tiempos de angustia y desolación que nadie representa mejor que Sergio Massa. El destino está siendo muy injusto con él. La Providencia debería revisar sus planes: no se lo puede someter a este escarnio. ¿ Tajaí, Todopoderoso? Si tajaí, si todavía estás gobernándonos desde el más allá (si no lo estás, te reentiendo), pido que te apiades de él. De onda te lo pido.

Estoy hablando, claro, del tortuoso derrotero que lo está llevando nuevamente al kirchnerismo. Sergio fue intendente de Tigre. En términos electorales, poca cosa. Fue jefe de Gabinete de Cristina. La nada misma. O peor. Hasta Aníbal Fernández, una suerte de falla geológica, y Coqui Capitanich, una falla, sin más, lo fueron. 

Cuando Cristina, en su perversión política infinita, quería castigar a alguien, exponerlo, degradarlo, lo hacía jefe de Gabinete. Sergio, pícaro como pocos, se dio cuenta y le renunció. Antes lo había hecho Alberto Fernández, que después de huir despavorido se convirtió en uno de los más agudos críticos de la señora [N. de la R.: sí, es el mismo Alberto Fernández que hoy la acompaña en la fórmula]. 

Les decía: Sergio escapó de las garras del enemigo, o de la enemiga, y a partir de ahí se convirtió en la gran estrella del firmamento local, que cortaría los sueños de eternidad de Cristina y amassaría sus propios sueños presidenciales. Ya sabemos que esa historia no terminó como a él le hubiese gustado. Pobre, con lo lúcido que es. Una noche, comiendo un asado en casa, cuando Macri llevaba un año en el poder, me hizo ver, antes que nadie, que el Gobierno lo había sorprendido: "Políticamente se mueve bien, pero económicamente es un desastre. Lo contrario de lo que todos esperábamos". Profético el tigrense de los llanos. Profético y seductor: las mujeres de casa estaban encantadas con su discurso.

Después, a medida que sus horizontes se estrechaban, que su "ancha avenida del centro" devenía sendero intransitable, empezó a coquetear con el kirchnerismo en el Congreso. Se ganó entonces el apodo de Ventajita, acaso el mayor acierto político de Macri (también le reconozco como hallazgo lo que dijo el lunes al inaugurar el Paseo del Bajo: "Este pavimento no es relato, es real"). Ventajita: una verdadera lápida que Sergio se dedica a honrar. Ya no está pensando en si vuelve o no a los brazos de Cristina, sino en qué términos lo hace. Es ahí donde pido que la Providencia obre con misericordia. Alberto Fernández, Felipe Solá y ahora Massa tomaron en su momento lo que parecía más una decisión de vida que una estrategia política: ellos son peronistas, peronistas de Perón, y no camporistas, no hebedebonafinistas, no chavistas, no iranistas del Hezbollah. El economista de sus sueños es alguien como Lavagna y no alguien como Kicillof, al que calificaban de "zurdito". Alguno de ellos ha dicho, en la intimidad, que el peor error de Perón fue Isabelita, y el de Néstor, Cristina. Todos ellos, como Pichetto, Urtubey, Schiaretti y tantos otros, no se identifican ni con las ideas, ni con los amigos, ni con el tipo de liderazgo de la señora. ¿Por qué la suerte, esquiva y cruel, los vuelve a poner en sus fauces? ¿Por qué quedan otra vez a tiro de sus vejámenes? Si algo hicieron mal, ¿no podrán purgar sus penas con prisión domiciliaria y no en las cárceles patibularias que ella les tiene preparadas? Al Todopoderoso me dirijo: entre el cielo y el infierno, ¿no se les podrá conseguir en Airbnb un purgatorio con vista al río?

Por supuesto, no ignoro que Sergio se ha ido quedando sin alternativas -hasta las mujeres de casa lo miran ahora con desdén- y que su coartada es la inclusión de Alberto en la fórmula. Un anticristinista rabioso como conjuro del cristinismo, diseñado por Cristina. Jugada genial, con la salvedad de que es la misma jugadora que ya tiró varios penales a la tribuna.

La referencia futbolera me da pie para ir a la médula de esta columna: de qué forma nuestro país puede solucionar sus problemas. Hemos probado con Néstor, racinguista; con Cristina, hincha de Gimnasia; con Mauricio, bostero. Dicen que Alberto F. es hincha de Argentinos Juniors, pero sospecho que ya se debe haber hecho de Gimnasia. Massa es el alma mater de Tigre, que acaba de descender. Lavagna es hincha de Lavagna, que no se está clasificando para ninguna de las Copas. Urtubey seguramente es de Juventud Antoniana o de Gimnasia y Tiro, y una vez lo vi en una foto con la camiseta de Boca. También María Eugenia Vidal es bostera. Lo mismo que el Pichichi Scioli. Ya se imaginan adónde estoy yendo, ¿no? Me pregunto: ¿y River? ¿Qué lugar tiene hoy River en la política argentina? Concretamente, propongo que le demos una oportunidad al Muñeco Gallardo, o a Rodolfo D'Onofrio, que tienen un gran equipo (ese sí es el mejor equipo de los últimos 50 años) y ganaron todo. ¿Suena extravagante? No más que Trump o Bolsonaro. No más que Alberto F. precediendo a CFK. No más que la fórmula Kicillof-Magario.

Digo, ya estamos hartos de perder por goleada. Qué difícil se nos está haciendo conseguir un buen DT.

LA NACION


miércoles, 29 de mayo de 2019

MUNDOS RAROS Y CURIOSOS OLVIDOS

"Ninguno de los tres poderes que presiden la organización social es capaz de causar el número de miserias con que los encargados de la autoridad judicial afligen a los pueblos cuando frustran el objeto de su institución"
José de San Martín

Por 
Enrique Guillermo Avogadro

Es sabido que la Argentina es de una originalidad nefasta pero creo que hemos logrado contagiar al mundo de nuestra extraña y suicida locura. El Brexit y el avance de los populismos nacionalistas y separatistas en Europa, que amenazan terminar con el período de paz y crecimiento más exitoso y prolongado de su historia, la paulatina degradación de los acuerdos climáticos y nucleares, la renovada guerra comercial entre Estados Unidos y China, el peligro de un nuevo conflicto armado con Irán, la probada incapacidad de la comunidad internacional para poner fin al desastre humanitario de Venezuela, etc., justifican esa creencia.

En el plano local, el denigrante espectáculo que ofrece el Poder Judicial, desde la Corte Suprema, en manos de una mayoría que tiende a garantizar impunidad a los saqueadores (debemos seguir evitándolo, como hicimos la semana anterior), pasando por la Cámara Federal de Casación, con miembros que se tiran en público de los pelos, y plagada de jueces inmorales e inexplicablemente enriquecidos, no deja de llamar la atención de toda la región, donde se avanza sin pausa contra la corrupción. No es para menos, ya que aquí esos mismos magistrados han conculcado, pese a que constituyen derechos constitucionales, los principios de igualdad ante la ley, inocencia, juez natural, ley anterior al hecho del proceso, ley más benigna para el acusado, limitación temporal a la prisión preventiva, insubsistencia de la acción penal por exceso de tiempo sometido a proceso, etc.

En otro orden de cosas, me parece rarísimo que la noticia más potencialmente dramática para nuestra economía haya pasado inadvertida. Me refiero al dictamen del Gobierno de los Estados Unidos, recomendando que se ventile en sus tribunales el juicio del fondo Bulford contra nuestro país; el proceso, relacionado con la expropiación de YPF -la ruinosa solución que Cristina Fernández eligió para enterrar en la impunidad de los robos de su marido muerto y sus testaferros-, nos puede costar otros US$ 5.000 millones (ya Axel Kiciloff pagó a Repsol US$ 10.000 millones), o $ 225.000 millones, al tipo de cambio actual.

Para tener una idea de la magnitud de esa cifra, recordemos que la Asignación Universal por Hijo cuesta al Estado, por año, $ 50.000 millones, o sea, casi cinco veces menos que el nuevo saqueo que engrosará el botín de los Kirchner, que están detrás de los acreedores.

Eso obliga a reiterar la curiosidad que constituye que Enrique y Sebastián Eskenazi no hayan sido siquiera llamados por la Justicia (en este caso, representada por los jueces Ariel Lijo y Claudio Bonadio) a dar alguna explicación, pues son los teóricos dueños de Petersen Energía, de España, que pertenece a su vez a una empresa homónima de Australia, cuyos propietarios hay que adivinar quiénes son realmente. Y esto reviste una gravedad inusitada porque, si se demuestra que todo el tema de YPF configuró un delito, el Estado tendría un fuerte argumento para respaldar su pretensión de que el juicio antedicho tramite ante los jueces argentinos.

Ninguno de los magistrados intervinientes en las muchas causas de corrupción de la familia ex-presidencial se ha dignado visitar la faraónica tumba que Lázaro Báez construyó para su amigo Néstor, en Río Gallegos. Si eran tan íntimos como para que éste edificara semejante mausoleo, y se hiciera cargo de su "seguridad" durante años, ¿cómo sostiene ahora su viuda que nada sabía sobre esa relación, sobre todo por los enormes beneficios que ésta generó para sus deudos?

La foto de Cristina Fernández sentada entre sus cómplices juzgados por defraudar al Estado por cifras siderales, apareció en la tapa de los diarios de todo el mundo. Mostraron a una mujer que registra nada menos que once procesamientos y cinco pedidos de prisión preventiva, todos firmes y, pese a ello, se encuentra entre los candidatos mejor posicionados para alcanzar la primera magistratura.

¿Y qué decir de la decisión de este personaje al designarse sólo como Vicepresidente en una PASO consigo misma cuando, según las encuestas, vencería a Mauricio Macri en un ballotage por más de ocho puntos porcentuales?

Alberto Fernández, el elegido candidato a Presidente por su segunda (¡otro record mundial!), prueba en cada aparición su camaleónico proceder. Después de despotricar durante años contra la sucesora de Néstor, acusándola de hechos gravísimos (memorándum con Irán, Nisman, Ciccone, Boudou, pobreza, Indec, etc.), sin pudor alguno ahora acepta, se abraza con la hermana Alicia, recibe regalos de Rudy Ulloa Igor y amenaza a los jueces (muchos de ellos alumnos suyos en la facultad y todos designados durante el kirchnerismo) que avanzan contra la corrupción.

Nada puede sorprender en este personaje, cuya ausencia entre los acusados por las defraudaciones también asusta, ya que fue Jefe de Gabinete de ambos presidentes y cofirmante de todas sus resoluciones; a pesar de tener su despacho al lado, nunca vio los bolsos trajinados, por padecer de la misma ceguera que afectó a todos sus sucesores.

El jueves, a una pregunta de amigos, respondí que, si no fuera argentino, estaría más que divertido contemplando lo que aquí sucede, una verdadera ópera bufa; como nací y vivo aquí, no puedo más que llorar ante la tragedia nacional.

Enrique Guillermo Avogadro

Abogado

martes, 28 de mayo de 2019

LA ESCUELA AUSTRÍACA DE ECONOMÍA (3° PARTE)


El objetivo de la economía no es profetizar, sino comprender lo que sucede como fruto del humano actuar. En definitiva, analiza y se interesa por conocer los resultados prácticos de la conducta humana. 

Por Gabriel Boragina ©

"Proposición 3: Los “hechos” de las ciencias sociales son aquello que las personas creen y piensan. A diferencia de las ciencias físicas, las ciencias humanas involucran los planes y propósitos de los individuos. Mientras que la eliminación de los propósitos y planes en las ciencias físicas condujo al progreso en la investigación, en la medida en que ello permitió superar el problema del antropomorfismo, en las ciencias sociales, la eliminación de los planes y propósitos de los individuos da como resultado la extirpación, en la ciencia de la acción humana, de su materia de estudio primordial. En las ciencias humanas, los “hechos” del mundo son lo que los actores creen y piensan" [1]

Este párrafo alude a la discrepancia en materia de metodología de la investigación entre las ciencias naturales y las ciencias sociales. Las primeras operan bajo el sistema hipotético deductivo, en tanto que en las sociales la sistemática de investigación es a través del procedimiento axiomático deductivo. Se inicia el análisis desde un axioma básico -que es la acción humana- y, a partir del mismo, se van desarrollando los otros teoremas que se deducen de la ciencia. En ciencias naturales se comienza con hipótesis, que pueden ser de las más diversas entre sí. Cabe puntualizar que estas hipótesis se basan en observaciones, pero siempre hay un trabajo teórico previo necesario (por mínimo que este pudiere parecer) para elaborar tales hipótesis. Es decir, la volición humana y la actividad mental ocupan un lugar preponderante, tornándose -desde nuestro punto de vista- en un elemento común a ambos campos de investigación.

"El significado que los individuos dan a las cosas, las prácticas, los lugares y las personas determina la forma en que se orientarán a sí mismos en la toma de decisiones. El objeto de las ciencias de la acción humana es la inteligibilidad, no la predicción. Las ciencias humanas pueden lograr este objetivo porque nosotros mismos somos lo que estudiamos, o porque somos capaces de tener un conocimiento intrínseco de la acción humana. Por el contrario, las ciencias naturales no pueden perseguir un objetivo de inteligibilidad intrínseca puesto que se apoyan en un conocimiento extrínseco. Nosotros somos capaces de comprender los planes y propósitos de otros actores porque nosotros mismos somos actores humanos" [2]

El objeto de estudio de la acción humana es el hombre, considerado en su faz autoexhortativa. Se lo supone dotado de libre albedrio, y lo que concierne a ella no son las motivaciones psicológicas de la acción, sino la acción en sí misma, no tanto lo que provoca la acción, sino las consecuencias de ella. Tampoco busca predecir la acción.

Frente a determinados fenómenos sociales, no es competencia del campo de la acción humana predeterminar ni explicar de qué manera los hombres se comportarán ante los mismos en el futuro. El objetivo de la economía no es profetizar, sino comprender lo que sucede como fruto del humano actuar. En definitiva, analiza y se interesa por conocer los resultados prácticos de la conducta humana. El objeto de estudio (a contraste de las ciencias naturales) es el hombre mismo en su interacción social, es decir, nosotros nos estudiamos a nosotros mismos. Y esto es posible porque el concepto de acción es esencialmente inteligible, desde el momento que podemos proceder por introspección. Somos capaces de observarnos a nosotros mismos y, además, conscientes de que actuamos y -a partir de esta premisa- podemos elaborar los teoremas dentro del campo de la acción.

"El ejemplo clásico utilizado para ilustrar esta diferencia esencial entre las ciencias de la acción humana y las ciencias físicas es el siguiente: imaginemos a un marciano analizando los “datos” que le ofrece la observación de la Estación Central (Grand Central Station) de New York [
4]. Nuestro marciano podría observar que cuando la pequeña aguja de un reloj que cuelga en la pared apunta hacia un número, el ocho, se produce un gran movimiento de cuerpos que salen de unas cajas en movimiento. Asimismo, cuando esa pequeña aguja señala el número cinco, el marciano observa que un gran número de cuerpos vuelven a introducirse en esas enormes cajas. El marciano podría desarrollar toda una teoría predictiva acerca de ese pequeño círculo colgado en la pared –el reloj– y la relación de movimiento de los cuerpos con respecto a las cajas. Pero, a menos que el marciano logre entender los planes y los propósitos de esas personas (el significado de expresiones como “ir al trabajo”, “volver del trabajo a casa”), su comprensión “científica” de los datos obtenidos en la Grand Central Station será muy limitada" [3]

Lo que limita al marciano en las conclusiones de su "teoría" no son ni el reloj, ni las cajas, que -en suma- no se tratan más que de objetos que no revelan (ni pueden hacerlo) "comportamiento" de ninguna naturaleza. Sino el elemento restrictivo es su falta de comprensión o desconocimiento completo de la capacidad de decisión que está guiando a esos "cuerpos", que no son más que seres humanos, cada uno con su propio impulso de la voluntad e intencionalidad. La tarea del marciano se complicaría aún más si descubriera que cada uno de esos "cuerpos" difieren entre sí en cuanto a propósitos y planes (todos van a "trabajar" en el ejemplo, pero no todos van al mismo trabajo, y esos trabajos se han elegido -a su vez- por muchas desiguales razones de cada una de esas personas).

Las teorías deterministas se oponen a las de la acción humana, porque llegarían conclusiones similares a la del ejemplo del marciano que nos pone el autor que estamos comentando. Establecen relaciones causales que prescinden de los elementos volitivos humanos y que diversifican el estudio de ambos campos de la ciencia. El establecimiento de nexos causales en ciencias sociales no puede desechar nunca la premisa del libre albedrío en el hombre, de lo contrario la conducta humana debería ser estudiada de la misma manera que se lo hace por ejemplo del comportamiento de los animales, pero esto -a su turno- sería imposible, porque supondría que hay un observador externo que no se comporta como un animal. Y ese observador externo es el ser humano.


[1] Peter J. Boettke. *Hacia una Robusta Antropología de la Economía**La Economía Austriaca en 10 Principios* Instituto Acton Argentina. Trad: Mario Šilar..

[2] Boettke, ibídem.

[3] Boettke, ibídem.


Artículos relacionados:
LA ESCUELA AUSTRÍACA DE ECONOMÍA (2° PARTE)





lunes, 27 de mayo de 2019

IMPUNIDAD PARA LOS K

El regreso del guerrero fue demoledor. La vuelta de Jorge Lanata a la tele fue contundente en el rating y en el contenido de su denuncia. Tuvo sus momentos de ironía y humor, por supuesto.

Por Alfredo Leuco

Ver a la imitadora de Cristina manejando los hilos del títere Alberto Fernández fue de alto impacto. Esa imagen vale más que mil palabras. Del ridículo nunca se vuelve decía Perón y Lanata tuvo varios momentos donde dejó en ridículo el relato y la mentira de Cristina y su gente. Ese vagón del tren donde todos leen el libro de Cristina fue una forma de tomarnos por tontos a todos.

Podría haber sido un divertido spot de campaña o de propaganda, pero los medios K lo “vendieron” como una noticia que realmente ocurrió. Y fue claramente algo armado de manera burda. Es que no pueden con su genio.

No se conforman con la realidad de que el libro fue un gran éxito. Además, nos quieren vender que en el tren todos lo iban leyendo. Son insaciables a la hora de recaudar y de mentir. ¿No será mucho? Salvo que el tren haya salido de la estación Instituto Patria con rumbo al penal de Ezeiza que algunos pícaros bautizaron “Pabellón Néstor Kirchner”.

Precisamente en ese sector de la cárcel se planificó el “Operativo Impunidad”, el plan para que Cristina no vaya presa que fue denunciado anoche por Lanata y también, por Luis Majul. Escuchar a los personajes de la opereta en vivo y en directo, en audios absolutamente legales nos hizo sacar varias conclusiones.

Primero: Cristina fue la jefa del operativo. En varios momentos, algunos personajes oscuros del mundo de los espías que fueron los engranajes de todo esto, van desde Instituto Patria, donde reina Cristina, a la calle 25 de mayo, sede de la ex Side y luego AFI.

Intervienen varios militantes kirchneristas que estuvieron entre los topos al mando de Oscar Parrilli al que ellos llaman “viejo inútil” en línea con el rótulo de “pelotudo” que le había puesto Cristina.

También aparece “el gordo Juan” que fue el lugarteniente de Parrilli, Juan Martín Mena y otros personajes menores, como Carlos Zelcovich, el correo del Zar o de la zarina que en un momento dice: “En Dolores agarraron viaje. Hay que declarar allá”.

Nombran a Víctor Hortel (a) “El Negro” que fue el inventor del “Vatayon Militante” para llevar a los presos a los actos de Cristina y ahora es abogado de Lázaro Báez. Todo tiene que ver con todo. Hay personajes de la banda, que son delincuentes todo terreno.

Pero las dos piezas claves de la “Operación Impunidad”, son las dos alas del cristinismo que aman y odian al Papa Francisco. Las encabezan Eduardo Valdés y Horacio Verbitsky que se repelen entre sí, pero los une el espanto ante la posibilidad que Cristina, la jefa de ambos, vaya presa.

Por eso, su principal objetivo es ensuciar y destituir al fiscal Carlos Stornelli y al juez Claudio Bonadio para voltear la causa de los cuadernos y los graves testimonios de los arrepentidos. Disponen de mucho dinero para inventar denunciantes, fabricar “testigos” y “testimonios”, untar periodistas y facilitar las cosas en algunos pasillos de tribunales.

La plata la sacan de todo lo que robaron y también aportan fortunas algunos empresarios que participaron del cartel de los sobreprecios y coimas, que tienen tanto o más interés que Cristina en que se caiga esta causa que es la más importante de la historia argentina contra la mega corrupción de estado y el sistema de recaudación ilegal más colosal que se haya montado.

Eduardo Valdés y Horacio Verbitsky son los dos autores materiales de la operación cuya jefa espiritual y autora intelectual es Cristina. Valdés fue embajador en el Vaticano y es uno de los principales nexos entre Cristina y el Papa y aplica su experiencia como lobista empresarial.

En las escuchas lo definen como “el amigo del amigo de Dios”. Es como para poner el grito en el cielo. Porque esta Armada Brancaleone se comporta como un elefante en un bazar. Son torpes y patéticos y por eso más peligrosos.

Roberto Baratta, uno de los principales recaudadores de coimas que está preso con su jefe Julio de Vido se hace el espía y habla de “Ramos Parrilla”, y de Dolores, como si fuera el nombre de una mujer, como si de esa manera pudieran disimular la subordinación militante del juez de Dolores, Alejo Ramos Padilla a las órdenes de Cristina y su banda.

Horacio Verbitsky viene de ser uno de los jefes de inteligencia de Montoneros y fue el principal denunciante del Papa Francisco como “entregador” de sacerdotes a las catacumbas de las torturas y desapariciones de la dictadura militar.

Valdés lo necesita pero lo odia. Tanto que lo llama “Viboretsky”, en su pretendido “lenguaje encriptado”. Los peronistas que vienen de la derecha de los 70 desprecian a Horacio y no lo llaman por su apodo histórico de “Perro”.

Lo llaman víbora por su carga venenosa y la capacidad de arrastrarse por los pantanos más sucios. Estaban todos tan ansiosos por concretar esta falsedad en los tribunales que Eduardo Valdés habla del operativo Puff, y como su interlocutor no lo entiende, le dice que es para mandar “a la concha de su madre a Stornelli y a Bonadio”.

Le adelanta toda la película engañosa y le avisa que Verbitsky lo va a publicar en su sitio web con lujo de detalles. Muchas de las conversaciones ocurren antes de que se haga la denuncia en el juzgado K de Dolores. Se fueron de boca. Eyacularon precozmente. Estaban muy ansiosos y dejaron los dedos pegados por todas partes.

Hoy Eduardo Valdés intentó ser irónico en su desmentida pero no pudo explicar cómo fue que se enteró de la denuncia, once días antes que se produjera. Para decirle que se calle a Fabián de Sousa, (íntimo de Alberto Fernández y socio de Cristóbal), Valdés dice que el más joven del canal no sea bocón.

¿Quién?, le preguntan del otro lado de la línea y Valdés dice: Fabián de Sousa. Los mandás a espiar y tocan el timbre. Varias veces hablan de “la señora del Instituto Patria”. ¿Quién otra que Cristina puede ser? Todo se confirma con su discurso en el senado.

Sentada en su banca por la minoría, Cristina denuncia todo esto como si fuera una maniobra del gobierno, los medios, el partido judicial y la embajada de los Estados Unidos pero comete un grave error: denuncia mucha información que hasta ese momento nadie sabía, solo los que habían armado esta patraña ridícula y desesperada.

Valdes, según contó Lanata, intentó que un juez ejerciera la censura previa y prohibiera la emisión del programa porque se iban a utilizar “escuchas ilegales que lo involucraban”. El sentido común y el derecho hicieron que el juez rechazara semejante salvajada con forma de medida cautelar.

Con distintos roles también participan como actores de reparto, Rodolfo Tailhade, otro ex y actual espía y Roberto Zelicovich, un funcionario todo terreno, o Juan Pablo Schiavi o el Mono Minicelli, cuñado de Julio de Vido, otro presunto “preso político” que está detenido por la mafia del contrabando de la aduana.

¿Tal vez traficaban libros de Ernesto Laclau y por eso hablan de preso político? ¿O tal vez porque la cara de piedra es impenetrable? El líder judicial del cristinismo extremo es el ex juez Eugenio Raúl Zaffaroni. Pero no tiene mucha calle. De hecho en febrero cometió un sincericidio cuando confesó que “Stornelli debería apartarse de la causa por razones de transparencia”.

Zaffaroni dijo que estaba “alarmado” porque en esa investigación “se juega nuestro destino nacional”. En realidad se juega la libertad o la cárcel para Cristina y su estado mayor de la corrupción.

En la desesperación y ante las pruebas y evidencias tan contundentes, los grupos de tareas K dedicados a hacer operaciones sucias de poca inteligencia, resolvieron ensuciar a los que llevan adelante las investigaciones o a los periodistas independientes.

A Cristina ya no la pueden defender porque las pruebas y testimonios son abrumadores. Pasaron entonces a la fase dos, la que varios de estos mismos personajes también hicieron contra otro fiscal, Alberto Nisman: extorsionar e injuriar con falsedades absolutas y algunas muy burdas.

El objetivo es que Cristina y todos sus cómplices queden como angelitos. Pero son demonios que produjeron el robo del siglo. Y eso merece un juicio, una condena y un castigo. 


domingo, 26 de mayo de 2019

PERO HAY ALGO QUE TE VENDE…

Sin códigos y sin vergüenza. La Señora lucha por su libertad. Si para eso hay que ser presidente o vice, o lo que el destino disponga, así se hará. Primero la libertad y después veremos. 

Por Rogelio Alaniz

I

La Señora finalmente se sentó en el banquillo de los acusados. Desde los tiempos de las juntas militares los argentinos no presenciamos esta escena en la que el poder rinde cuentas. La democracia es imperfecta y en la Argentina mucho más, pero convengamos que a veces a los ciudadanos de a pie nos da algunas satisfacciones. El pasado martes, los argentinos que creemos en la ley y la decencia nos dimos el gusto.


II

La Señora que salió de su residencia de la Recoleta, que ingresó al recinto exhibiendo poder y riqueza, debió escuchar sentadita y sin abrir la boca el informe judicial que le imputa ser la jefa de una asociación ilícita. A pocos metros estaban sus cómplices, socios y sirvientes. No se sentaron juntos porque la Señora, en otro gesto que la distingue, practica el “yo no fui”. Y no debería sorprendernos que en posteriores declaraciones asegure que ella a los señores José López, Julio De Vido, Lázaro Báez y Carlos Kirchner no los conoce, no los vio nunca y no sabe absolutamente nada de sus vidas.


III

Sorpresas que da la vida. Jamás imaginé que alguna vez iba a sentir una lejana pero consistente corriente de simpatía por De Vido, Báez and Company. Corruptos, ladrones, delincuentes, apretadores, sin embargo no batieron, no entregaron a nadie. Ni a su jefe, ni a su jefa. Y a esa lealtad la Señora la paga dejándolos colgados de la palmera. Ni visitas, ni saludos, ni guiño.


IV


“Si vas a robar robá, pero hacelo con códigos” aconsejó el compañero Guillermo Moreno. Y ahora empezamos a sospechar que el destinario de esa contraseña del hampa era la Señora. Corrompió, robó, destruyó ideales y esperanzas, pero a los caídos en ese singular campo de batalla, la única atención, la exclusiva cortesía que les brinda, es una mueca de desprecio.


V


“Qué buen vasallo si hubiera buen Señor”, dice más o menos así el cortesano amigo del Cid Campeador. Y realmente. ¡Qué buenos vasallos los kirchneristas! Todos. Incluida las señoras Carlotto, Bonafini y Almeida. Dios mío. Ni en las pesadillas más truculentas hubiera imaginado vivir la escena en la que las abanderadas de los derechos humanos comprometen el poco o escaso honor que les queda para defender a una mujer que en los tiempos difíciles estuvo más preocupada en ser una abogada exitosa que una abogada preocupada por los perseguidos y desaparecidos.


VI


En 1957, Fernando Ayala filma la película “El Jefe”. El guión es de David Viñas. Trata de un personaje simpático, pintón, carismático que fascina a sus seguidores. Es el jefe y nadie lo discute. Los inicia en el delito y los representa. Hasta el momento en que las cosas se ponen difíciles y el jefe los entrega. La moraleja es clara: no es aconsejable someterse a la voluntad de un jefe. Y en 1957 estaba claro, muy en claro, quién era el destinatario del texto de David Viñas. Los Jefes y las Jefas, se parecen demasiado. Entre otras cosas porque detrás de sus fanfarronerías, ocurrencias, arrebatos de guapos, se esconde un manipulador, un cobarde, un miserable y un canalla. No estaría mal que los presos de Ezeiza vean esa película. Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia.


VII

Sin códigos y sin vergüenza. La Señora lucha por su libertad. Si para eso hay que ser presidente o vice, o lo que el destino disponga, así se hará. Primero la libertad y después veremos. El señor Alberto Fernández se ocupó en dejar bien en claro esta demanda. Es más, la única declaración firme, concreta, consistente, real, fue la de revisar los procesos judiciales y sancionar a los jueces que se atrevieron. Como los militares en 1983, los kirchneristas solo están preocupados por la amnistía.


VIII

Me divierten quienes se florean en explicaciones acerca de las condiciones geniales de conductora de Cristina por haber designado al Alberto candidato a presidente. Conociendo el paño, no nos sorprendería que dentro de unos años nos enteremos que al Alberto lo ungió Florencia, como en su momento coronó a Boudou, según leímos en “Sinceramente”. Anécdota más, anécdota menos, las decisiones políticas del populismo se toman en la alcoba.


IX

Todo esto resulta muy divertido y bizarro. Pero convengamos que estas gambetas, estas jugadas con naipes marcados, estos falta envido con un cuatro, esta retórica de cuentero de feria, solo son posibles en lo que Marco Denevi calificó como la República de Trapalanda.


X

Me parece que Cristina se equivoca fiero con Alberto Fernández, como en su momento se equivocó con Amado Boudou, con el Morsa Aníbal Fernández, con Carlos Zannini o con Florencio Randazzo. Como diría mi tía Cata: “Desde que quedó viuda, esta chica no tiene suerte con los hombres”.


XI


A Cristina no la denunciaron ayer. La denunciaron hace más de diez años. A su manera la Señora es una beneficiaria privilegiada del garantismo. Las cifras del saqueo son pavorosas. Pasaron diez años de impunidad, chicanas y complicidad. Y sin embargo, los Kirchner insisten en que son perseguidos por jueces que a la hora de la verdad mayoritariamente los protegieron.


XII

Que las cortinas de humo y las triquiñuelas de la runfla populista no nos hagan perder de vista lo importante: la cleptocracia está sentada en el banquillo de los acusados. La jefa, sus colaboradores, empleados y sirvientes. Estamos viviendo un tiempo histórico.


XIII

A no llamarse engaño o dejarse marear por los cantos de sirena de los conocidos tahúres de la política. Cristina está luchando por su libertad. La jefa de la cleptocracia empezó a ser juzgada en los tribunales. Cristina sabe que su derrota política es la cárcel. Todas las sorprendentes señales de «moderación» de los kirchneristas apuntan al pacto de impunidad.


XIV


Los argentinos debemos saldar cuentas con la corrupción. La corrupción transformada en sistema con la máxima autoridad del poder político transformado en jefe o en jefa del saqueo es de terror, también mata y desquicia el tejido social.


XV


La decisión de Cristina de consagrar al Alberto de candidato a presidente no es audaz, es irresponsable. Supongamos que le va todo bien y la fórmula gana las elecciones. ¿Otra vez una presidencia con doble comando? ¿Fernández aceptará ser un títere de Cristina? ¿Cristina, aceptará ser la Isabel de Fernández? Disparate y caos.


XVI

Es la primera vez en la historia criolla que la vicepresidente elige al presidente. Solo el peronismo es capaz de brindarnos estas novedades. Esto es tan disparatado y bizarro que hasta la fórmula de Cámpora era sensata. Perón después de todo estaba proscripto. La Señora no lo está. Debería estar presa, pero tampoco lo está.


XVII

Al populismo le encantan las consignas y los jingles. Jolgorio de bailanta. Rimas primarias, que ni un letrista de cumbia villera se animaría a escribir, se presentan como el arquetipo de la sensibilidad popular. “Sin corpiños y sin calzón, somos todas de Perón”, cantaban las encantadoras y recatadas chicas de la rama femenina. “Framini, Anglada, Perón en la Rosada”, coreaban en marzo de 1962. “Suenen los pitos, suenen los los bombos, somos peronchos y armamos kilombo”, se ufanaban los muchachos antes de que llegara López Rega y pusiera las cosas en su lugar. “Cámpora al gobierno, Perón al poder”, se jactaban en marzo de 1973. “Traigan al gorila de Alfonsín, para que vean, que este pueblo no cambia de ideas, sigue las banderas de Evita y Perón”, cantaban con Herminio Iglesias en 1983.


XVIII

¿Y ahora? Les tiro algunos jingles y no se los cobro: “Alberto, Cristina, los Kirchner en la Argentina”. ¿Y por qué no?: “Alberto, Cristina, Máximo en Argentina”. Y ya que estamos en la brecha, ¿por qué no?: “Alberto al gobierno, Florencia al poder”. Una confesión me sea permitida: no me devané los sesos para rimar estas consignas nacionales y populares. Y tal vez esa ligereza y ramplonería sean la clave de su posible éxito. Se las dejo gratis y sin reclamar derechos de autor.


sábado, 25 de mayo de 2019

EL SOFISMA DEL NEOLIBERALISMO


A lo largo de las últimas décadas, principalmente en Sudamérica, el término “neoliberalismo” ha cobrado un llamativo fervor y es usado únicamente por los lobbies izquierdistas. 

Por Santiago Junes y Lucas Junes

Cualquier persona que tenga conocimientos en la literatura y teoría de la doctrina del liberalismo, sabrá que el neoliberalismo no figura en ninguna de sus partes. No existe un “nuevo liberalismo”- Si bien la doctrina se va modificando, estructurando o mejorando a lo largo del tiempo, siempre sus ramas se basan, principalmente, en defender los tres derechos naturales-.

El término suele ser usado principalmente de dos maneras, las dos con el objetivo de descalificar a toda persona o a toda norma que opine o se aplique de una forma políticamente incorrecta. Aquél que esté abogando por una sociedad con estado limitado, un comercio libre de regulaciones y un sistema laboral manejado en su totalidad por los individuos fuera del aparato estatal, es el Leviatán de los SJW: social justice warriors (apodados de esta forma en los países anglosajones), o guerreros de la justicia social- y toda la “new left” (nueva izquierda). Estos segundos calificarán a los primeros como “neoliberales”, por más que no tengan ni la más pálida idea de la etimología ni el significado del término.

La segunda manera usada de forma despectiva de la expresión se da cuando el ente político de una determinada sociedad impone una serie de normas cuyo propósito de las mismas es reducir el gasto público, reformar el estado para mejorar su eficiencia reduciendo su tamaño, limitar drásticamente la expansión monetaria y abrir el comercio. Nuevamente las personas con ideales políticamente intervencionistas estarán mortificando con su palabra fetichista.

Ahora bien ¿De dónde surge el término “neoliberalismo”? ¿Qué políticas defienden los “neoliberales”? ¿Es una rama del liberalismo o del socialismo? Esas son las preguntas que intentaré responder en esta columna para desdecir todo tipo de argumento descalificador que posea este sofisticado término.

Las investigaciones hechas por el abogado y presidente de la FPP Axel Kaiser indican que el origen de la palabra neoliberalismo aparece por primera vez en 1938, el primero en usarla fue el pensador socialista Alexander Rustöw.

Rustöw, consciente de las atrocidades causadas por el sistema totalitario, que en toda literatura de la misma propone tácitamente las restricción de libertades naturales, y el progreso recíproco en los sistemas que se basan en la división del trabajo fundado en la propiedad privada de los medios de producción, estructura y sugiere un sistema entrelazando principios fundamentales de estos sistemas.

Así es como nace, teóricamente, unas de las variaciones de lo que Mises llamaba “el tercer sistema”, es decir, una serie de políticas intervencionistas que atentan contra las libertades de las personas pero no llegan a la aplicación del totalitarismo preservado en un sistema socialista soviético.

Entonces el neoliberalismo teórica y prácticamente es lo contrario al “respeto irrestricto a los proyectos de vida del prójimo” y no es más que una de las variables de sistemas intervencionistas, como lo es por ejemplo, la socialdemocracia.

Una vez plasmado esto, debería quedar claro que las políticas neoliberales son intervencionistas, y como toda norma intervencionista y coactiva, está destinada a llevar al decrecimiento económico. Y como un ejemplo de esto describiremos la situación de la Argentina.

Argentina hace exactamente un siglo estaba alejándose de las normas y políticas basadas en la libertad que llevaron al país a ser potencia mundial. Luego de los años 20’ el país adoptó medidas intervencionistas de mayor o menor grado, ya sea en el año 1946, con Perón al poder o con las dictaduras militares que se dieron más adelante, cuyas características fueron medidas como los controles de precios, aumentos de salarios ignorando los precios relativos, regulaciones laborales, la toma deuda y la emisión de moneda por encima de su demanda. Esto penetró profundamente en la economía a tal punto de destruirla.

A principios de este siglo el populismo tomó lugar no sólo en el gobierno, sino también en los ideales de las personas. Actualmente, el gobierno es un ejemplo del anti-liberalismo: en lugar de corregir los errores hechos por el régimen anterior y adoptar medidas radicalmente contrarias, se dedicaron a seguir con la emisión monetaria, aumento de impuestos, aumento del gasto público y sobre todo, toma de deuda. Como consecuencia, para no ir directos al default, el gobierno se vio obligado a realizar recortes en distintos sectores de manera estrepitosa.

Estas últimas medidas generaron en los defensores acérrimos del populismo y la justicia social un clima de odio profundo, calificándolos como un régimen “neoliberal”, obviamente, la descalificación nace desde la deducción de que se trata de un gobierno liberal. Como explicamos anteriormente, el gobierno de turno no tiene absolutamente nada que ver con la libertad. Pero en cierto sentido y sin ellos mismos darse cuenta, tienen razón al calificarlo de esa manera si tenemos en cuenta las raíces de la palabra “neoliberalismo”.

Los neoliberales son los populistas, los intervencionistas, los socialistas, aquellos gobiernos con una economía planificada casi en su totalidad. Lo que sucede al fin y al cabo, es que los que usan el término para descalificar carecen de los conocimientos necesarios para determinar la veracidad de si un sistema es neoliberal o no.

El gobierno actual es neoliberal, los que lo descalifican tienen razón, pero tienen un concepto radicalmente errado de lo que es, de donde viene y cómo son sus ideales (neoliberalismo). Ahora bien, cualquier persona que se califique de neoliberal o está sumamente confundida o desconoce de la literatura del liberalismo. El término usado como un neologismo es aceptado, pero teóricamente es algo inexistente para autodenominarse como tal. El neoliberalismo, como bien sostienen liberales como Friedrich Hayek o von Mises, no es más que una rama del intervencionismo.


El Club de los Viernes


viernes, 24 de mayo de 2019

¡CANDIDATOS!

Candidato es aquel que se postula a algo. Viene del latín canidatum; del verbo candidare, que significa “blanquear”. El candidato era el que iba de blanco, porque así vestían los que se postulaban a un cargo político en la Antigua Roma. El blanco significaba limpieza por fuera y... por dentro.

Por Malú Kikuchi


¿Podrían los candidatos argentinos a presidente, candidatearse de blanco con lo que eso significaría? No se sabe, no se contesta. Al día de hoy, en vísperas del 25 de Mayo, se conoce la candidatura de Alberto Fernández, candidateado curiosamente por su candidata a vice, Cristina Fernández.

Cuenta Carlos Pagni que en un tuit de Alessandra Minicelli, mujer de Julio De Vido, esta aclara que las planillas firmadas por su marido en la llamada causa “Vialidad”, también fueron firmadas por el entonces ministro de economía y por el jefe de gabinete, Alberto Fernández. Hoy, candidato.

Es difícil resistir un archivo. De la candidata a vicepresidente CFK, los muchos juicios que la esperan, hablan por sí mismos. Daniel Scioli, también candidato, asegura que está en el espacio de los Fernández. Y en Alternativa Federal, PJ centro. Scioli tiene el don de la ubicuidad.

El espacio progre FF promete ir a las PASO, porque de pronto recordó que pertenecen al PJ. Tiene razón Julio Bárbaro que dice “el peronismo es un recuerdo que trae votos”. Están en campaña. Sergio Massa candidato, va por la avenida del centro con el Frente Renovador, se lo disputan los 2 PJ.

Está con Alternativa Federal y al mismo tiempo con los Fernández. Sus probables 10 puntos de intención de voto definirían la elección. Es la figurita difícil que todos quieren. El, espera su mejor propuesta. Fue, como Fernández, jefe de gabinete de CFK. Lavagna compartía su espacio político.

Roberto Lavagna, hoy es candidato por Consenso 19. Tiene una larga historia como funcionario de varios gobiernos, desde Alfonsín a Duhalde, hasta Néstor K. No quiere ir a las PASO, por ahora sólo suma al GEN de Stolbizer, al socialismo y a una parte de la UCR. No alcanza.

Necesita a Alternativa Federal, que insiste en que vaya a internas. Daría la sensación de temer a las PASO. No se entiende, pretende ganar las presidenciales ¿y no está seguro de ganar una interna? Asegura no estar con Alternativa Federal, pero está hablando con ella. ¿Qué hará?

Alternativa Federal, comandada por el “Gringo” Schiaretti desde su exitosa reelección, se quedó escasa de candidatos. Juan Manuel Urtubey, gobernador de Salta y Miguel Ángel Pichetto, el eterno jefe del bloque de senadores del Frente para la Victoria, hoy de Alternativa Federal.

Pichetto nunca ganó una elección a gobernador en su provincia. Cuando asumió Macri dijo, “ahora puedo pensar”. Pareciera que en tiempos K no pudo hacerlo. En cuanto a Urtubey, personaje simpático, no ha sido un gran gobernador. Pero Pichetto y Urtubey son candidatos presidenciales.

Schiaretti convoca a Scioli y a Tinelli, poco serio. Urtubey habla con Macri, Pichetto con Lavagna, todo es posible, hasta las alianzas más impensadas. La UCR tendrá su convención el lunes 27/5, donde decidirá si sigue formando parte de Cambiemos, con condiciones, o rompe con Macri.

Si se queda, exigirá más injerencia en el futuro gobierno, si es que Cambiemos gana la elección. Los radicales están enojados. El presidente de la UCR y gobernador de Mendoza, Cornejo, se lleva muy mal con Macri. Si la UCR decidiera quedarse en Cambiemos, ¿el vice sería radical?

El compañero de fórmula de Macri, si se presenta como candidato, hoy hay dudas al respecto, ¿podría ser de Alternativa Federal? ¿Qué opinaría Lilita Carrió si así fuera? Demasiadas preguntas que esperan respuestas. Macri, por primera vez toma conciencia de su descrédito personal.

Cuenta Pagni que le ha pedido a Durán Barba una encuesta en serio, sin mentiras piadosas, para conocer su realidad. Entonces tomará la decisión de presentarse como candidato o no. Aun si la economía mejorara y la inflación bajara mucho, ¿alcanzaría para revertir la imagen negativa?

Si Macri delegara en María Eugenia Vidal la candidatura, ¿podría la gobernadora de Buenos Aires restablecer la fe en Cambiemos o ya sería tarde? Casi todas las alianzas son probables aunque parezcan imposibles. En las PASO se verán resultados que no serán los mismos que en octubre.

Muchos candidatos, eso es bueno. Muchas alianzas que serán imprescindibles para cualquier gobierno que asuma en diciembre. La República y sus instituciones están en juego, hay que pensar el voto. Perdón por contribuir al desconcierto generalizado.

jueves, 23 de mayo de 2019

CIRCULA POR LAS REDES: A PROPÓSITO DE LA MUERTE DE DANTE GULLO


Para evitar el olvido y divulgar la verdad a quienes no lo saben, especialmente a las jóvenes generaciones, inocentes protagonistas de ese olvido.

- Nuestra memoria colectiva es tan escasa que parece que nadie recuerda lo sucedido aquel 25 de Mayo de 1973.

Pasaron 45 años.

- Se puede catalogar como uno de los días más trágicos de nuestra historia y casi le adjudicaría a ese momento la génesis del drama que comenzaríamos a vivir luego, tras asumir la Presidencia de la Nación el dentista de San Andrés de Giles y ex-mucamo de Perón, el Dr. Héctor "Tío" Cámpora.

- Ese día, en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno el presidente de-facto General Alejandro Agustín Lanusse traspasaba la banda presidencial a Cámpora bajo los aplausos que bajaban desde los palcos y balcones, poblados por figuras como la actriz Soledad Silveira, el cura Mujica, el periodista Osvaldo Papaleo y su esposa Irma Roy, el "Brujo" José López Rega, Raul Lastiri y su esposa Norma López Rega, el cineasta Juan Carlos Gené (luego Director de Canal 7), Jorge Taiana, José Ber Gelbard, el Secretario del Movimiento Justicialista Juan Manuel Abal Medina y los terroristas Dardo Cabo, Galimberti, Fernando Vaca Narvaja, entre otros.

- La entrega de la banda presidencial por parte del General Lanusse al "Tío Cámpora" no fue acompañada por el Himno Nacional, sino por la marcha "Los Muchachos Peronistas".

- Concluido el acto, el Dr. Esteban "Bebe" RIGHI, chaqueño, de 34 años en ese momento, especialista en Derecho Penal y flamante Ministro del Interior, un joven lleno de "ideales" muy amigo de un hijo de Cámpora, se trasladó al Departamento de Policía y entre otras barbaridades cometidas, ordenó desarmar a todo el cuerpo de la Policía Federal.

- Mientras Cámpora se saludaba y fotografiaba con el presidente cubano Osvaldo Dorticós y con el chileno Salvador Allende, RIGHI ordenaba al Servicio Penitenciario Federal abrir las puertas del penal de Villa Devoto, para poner en libertad a la totalidad de su población carcelaria.

- Juan Manuel Abal Medina (hermano de Fernando, asesino de Aramburu y amante de Nilda Garré, partió con sus acólitos desde la sede del Partido Justicialista en Boedo 127, que se trasladaron al penal de Villa Devoto para efectivizar la "orden presidencial".

- Ese día salieron criminales de toda laya y color, asesinos y hasta reconocidos narcos internacionales como Francois CHIAPPE.

- A los pocos minutos, se incendiaron cientos de autos y colectivos alrededor de Plaza de Mayo y los muros de la Casa de Gobierno fueron pintados con la leyenda "Casa Montonera" por los "compañeros combatientes".

ESTAMOS HABLANDO DEL AÑO 1973, AUN NO ESTABAN NI VIDELA NI MASSERA.

Quemaron el auto del Cardenal Caggiano.

- 38 años después en 2011 pleno gobierno K, de aquella "La Noche Negra del 25", una camarada de ruta de aquel grupo de terroristas, la impresentable "Todo-terreno", desagradable y perversa guerrillera (R.E.) Nilda "Comandante Teresa" Garré, hizo lo mismo: destruyó las FF.AA, vaciándolas, destinando parte de su presupuesto a la Cámpora, descabezó a la Federal y la desarmó, mientras que Esteban Righi, hoy aburguesado millonario, obediente sirviente, fue nada menos que... el Fiscal General de la Nación Argentina!!

- Solo 38 años para repetir aquella torpe y maldita decisión que tanto daño nos produjo.

La memoria de los argentinos... ¿Dónde está...?

Divulguemos la verdadera historia y NO la fábula de "los jóvenes idealistas" (eufemismo de asesinos), que les quieren hacer creer a quienes no vivieron esa terrible época...!!!


* * *

Este es el mejor momento para difundirlo, para que se enteren los golpistas, Moyano y otros, que hay memoria y no queremos más populismo, falso, corrupto y ladrón.


Comparte en tus redes!


miércoles, 22 de mayo de 2019

CFK Y SU MANDADERO

La decisión de la malviviente Cristina Kirchner consistente en poner como candidato presidenciable al mercenario de Alberto Fernández, no deja de ser lamentable para quienes abominamos de la runfla inmoral que gobernó el país por espacio de 12 años.

Por Nicolás Márquez

La noticia prima facie es mala porque el piso y el techo de CFK estaban casi con la misma marca y con grandes dificultades de soportar airosa un ballotage. Luego, esta jugada política de la ex déspota tiene por función lograr rapiñarle votos al “peronismo racional” (valga la contradicción), esperando además que por decantación el peronismo y sus varias metástasis se encolumnen tras esta rara fórmula y el kirchnerismo ensanche así su base electoral.

En efecto, mucha gente no ideologizada quizás vote eventualmente por Alberto Fernández dado que éste reconocido chanta, con su voz serena y psicoanalizada le brinde al gran público la sensación de estar votando no por la impunidad de la delincuente CFK sino por una versión “republicana” del peronismo.

Al fin y al cabo, Alberto Fernández es un rosquero profesional siempre presto a la componenda, la mentira, el engaño, la trampa, el oportunismo y la mutación ideológica: Cristina eligió a un elemento de su talla moral.

El tema fundamental consistirá en saber si esos rasgos del citado crápula son conocidos por el gran público o si el mandadero de CFK logrará simular y ocultar su reciente pasado: tanto sea comandando la jefatura de gabinetes del gobierno más corrupto de la historia patria y a la par hablando pésimo de su indecorosa mandante.

A lo dicho, se le suma el desastre que constituye el gobierno socialista de Cambiemos, cuya economía estatista hace aguas por todos lados y encima tenderá a explotar de acá a octubre.

Justamente, Macri tuvo la opción de ser un duro Presidente de derecha y efectuar reformas de fondo quedando en la historia como un estadista, o un intrascendente timorato estilo radical/socialdemócrata: eligió esto último.

Así le va y así nos va.


Prensa Republicana




martes, 21 de mayo de 2019

QUE PODEMOS DECIR DEL SR. PRESIDENTE?


Ser objetivos a la hora de la grandeza , es un deber que el General San Martín, Alberdi, Moreno, Rivadavia, Avellaneda, o Roca y otros tantos grandes Argentinos, no hubieran desestimado, seguro, en la creación de nuestra Nación.

La figura de nuestro Presidente puede ser duramente criticada, por algunos medios y argentinos, pero también, criticada en forma constructiva, por otros medios y argentinos.

Un INGENIERO egresado del ITBA, es una “pantera” (no un gato) en materia de planificación, organización, dirección, como así también en liderar, ejecutar y controlar su plan.

A alguien que estuvo secuestrado, le sobra templanza, como para que nadie, ni ninguna adversidad, quiebre sus decisiones.

Alguien que soportó el asedio familiar de un padre especial, no se amilana frente a problemas que a la larga, tienen solución. Don Franco tuvo que verlo algún día asumir como Presidente.

Que podemos decir del Sr. Presidente?

Administró el incendio de la Argentina, en silencio, trabajando y en equipo, cual jefe de un cuartel profesional de bomberos. De un incendio que él, no provocó, pero del cual, en silencio y dando órdenes, se hizo responsable de apagar.

Que podemos decir del Sr. Presidente ?

En el Boca juniors la tribuna también lo “puteaban”, pero finalmente ganó todo, dejó el club saneado y, en silencio, se retiró. Aún deben resonar en sus oídos las palabras : “Cartonero Báez”... pero el “Cartonero Báez” hizo (como dicen los actuales spots), “lo que hay que hacer y se fue en paz”.

Que podemos decir del Sr. Presidente ?

Cuando tomó el comando de Buenos Aires, la Gema del Plata era un caos. Años más tarde la dejó siendo una de la ciudades más modernas de Latinoamérica. Eso si, se fue en silencio, sabía que había cumplido.

Que podemos decir del Sr. Presidente en Argentina ?

Las críticas negativas que queden para la oportunidad comercial de algunos medios... lo importante desde el punto de vista de un INGENIERO es que:

Argentina hoy tiene puertos.

Argentina hoy tiene rutas.

Argentina hoy tiene aeropuertos y una política regional aérea. Solo LADE y Aerochaco, habían esbozado ese perfil alguna vez en Argentina.

Argentina hoy tiene y exporta gas, hace tres años lo compraba.

Argentina hoy tiene y exporta energía, hace tres años la compraba.

Argentina hoy tiene petróleo, todo era bla, bla, bla, en Vaca Muerta. 


El Sr. Presidente se lo propuso, fue y lo hizo con un puñado de Argentinos, venezolanos, colombianos ....Y nos entregará antes de irse, o no, (ya a esta altura, la obra genuina de reconstruir la maltrecha y violada Argentina está hecha), “llave en mano” unos de los países petroleros más importantes del mundo.

Que podemos decir del Sr. PRESIDENTE ?

Quizá agregar que devolvió a Argentina sus VERDADERAS actividades productivas:

Hoy Argentina exporta 350 % más en carnes, que lo que exportaba hace tres años. Y será mucho más, en los próximos meses, por los recientes acuerdos con China.

Hoy Argentina a incrementado ostensiblemente la exportación de granos.

Ídem con la Pesca y la Minería, igual para el petróleo, la energía eléctrica y el gas.

Al fin y al cabo esta no era la Argentina verdadera? La de San Martín, Alberdi y tantos otros ?

Solo resta decirle: GRACIAS,  Sr. Presidente.

Si esto no es recuperar un país, que baje Dios y lo vea.

Alfredo Piazza
Dni 12.195.658




lunes, 20 de mayo de 2019

TRUCO FALLIDO



"La mistificación es un fenómeno frágil"

Laurence Debray


Por 
Enrique Guillermo Avogadro

Dos pedidos de disculpas: 1) a los muchos a quienes aún no he podido responder sus comentarios de la nota del sábado; lo haré durante la semana; y 2) a todos, por saturarlos con dos envíos tan cercanos, pero creo que la situación lo amerita.

Cuando el viernes a la noche escribí mi columna habitual, obviamente no imaginaba que nuestra prestidigitadora egipcia lanzaría a la mañana siguiente el anuncio de su decisión de designar a Alberto "Camaleón" Fernández como candidato a Presidente de la Nación por Unión Ciudadana, reservándose el segundo puesto. Los integrantes del sello del PJ que encabeza José Luis Gioja y se apelotonaron para la foto con ella, agotaron los stocks de hilo quirúrgico para suturarse el o... y se sumaron alegremente a la movida.

A mi modo de ver, se trata de una confesa muestra de clarísima debilidad. Todas las recientes encuestas que tanto nos han alegrado o preocupado -dependiendo del lado de la grieta en que nos encontremos- anunciando su triunfo son falsas, a punto tal que ni siquiera Cristina cree en ellas. ¿Alguien puede ser tan ingenuo, después de haberla soportado durante doce años, que renunciaría al más alto cargo si hubiera creído en una ventaja de ocho puntos sobre Mauricio Macri en un ballotage?

Su ego es tal que ni siquiera permitió que fuera su Instituto Patria quien hiciera el anuncio de la fórmula que competiría y, por primera vez en la trayectoria mundial de la democracia, un precandidato a vice designó a quien encabeza la fórmula. La lectura no puede ser más clara: soy yo quien decide.

Es decir, está convencida de que, como están las cosas, perderá otra elección -en 2017, esta genial mujer lo hizo contra dos "cuatro de copas" políticos, Esteban Bullrich y Gladys González- e intenta ahora evitar ser nuevamente la cara oficial de la derrota y ensayar alguna apertura en pos de votos ajenos. Pero su neo y fiel amigo no podrá de arrimarle nada.

Aún cuando tuviera éxito en la misión de atraer a Sergio Massa al redil abandonado, en modo alguno significaría que los escasos votos que éste conserva pudieran trasvasarse al binomio pretendiente; las sociedades ya no son aquéllas sobre las cuales podía usar el dedo elector. Pregúnteselo nada menos que a Luiz Inácio Lula da Silva, que no pudo hacerlo a favor de Fernando Haddad y permitió así el triunfo de Jair Bolsonaro.

Es cierto que Alberto Fernández tiene buenas relaciones con casi todo el espectro económico y político del país y del extranjero, puesto que ha usado todas las camisetas (cavallismo, menemismo, duhaldismo, nestorismo, massismo y, ahora, cristinismo) con buenos modales, pero nadie come vidrio.

No basta para convencer al círculo rojo que se haya desmarcado de la gestión de Cristina a punto de criticarla, hasta hace muy poco, agriamente; nadie cree en su capacidad de influir sobre el temperamento natural de ella. Si la fórmula tuviera éxito, el comando estaría en manos de la viuda y volveríamos al "socialismo del siglo XXI"; los mercados lo saben y los precios de todos los activos argentinos -moneda, bonos, acciones, campos, industrias, inmuebles, etc.- se depreciarían a la velocidad del rayo y todos esos eventuales amigos perderían en consecuencia.

Tampoco olvidan que, como todos los jefes de Gabinete kirchneristas, padeció de una ceguera localizada que le impidió ver el trasiego de bolsos en el despacho presidencial y, en una muestra clara de su nueva conducta enumeró él mismo, en un reciente sincericidio, quiénes son los jueces que deberán cuidar sus espaldas para no ser convertidos inmediatamente en nuevos Alberto Nisman. ¿Se asustarán tanto los nombrados como para paralizar los juicios?

Además, conviene pensar que, a contramano de la historia del kirchnerismo, esto se produce a un mes largo de la fecha de cierre de las candidaturas; entonces, hasta que éstas se oficialicen, no es más que un amague exploratorio y la fórmula podrá cambiar, o invertirse, sin que a nadie asombre.

Ante la declinación de Felipe Solá y Agustín Rossi a sus respectivas postulaciones a la precandidatura y dado que ambos tenían parecida intención de voto que yo en los Estados Unidos, para no ser menos también desisto irrevocablemente de competir contra Donald Trump. En cambio, Daniel Scioli informó que sostendrá la suya, para legitimar una PASO de ese espacio político; no era cosa de dejar solo al binomio inversamente ungido.

Se especuló que el anuncio pretende preparar el terreno para un indulto. Me parece un disparate adjudicar el "patriótico renunciamiento" que Cristina escenificó el sábado a esta causa: de triunfar, siempre podría confiar en la generalizada cobardía o complicidad de los jueces para obtener la impunidad. Por otra parte, los juicios por los zafarranchos del kirchnerismo aún no han comenzado y el trámite de la etapa oral de cada uno se extenderá, como mínimo, más de dos años. Luego la Cámara Federal de Casación revisará cada fallo y, finalmente, éste irá a la Corte Suprema, que no tiene plazos para expedirse. En resumen, estamos a años de una sentencia definitiva que habilitara, en caso de resultar condenatoria, un perdón presidencial.

Para no abusar más de usted, terminaré recomendando al Gobierno convencerse de que se trata de una buena noticia, y que debe abstenerse de reaccionar con precipitación o realizar cambios en sus propias fórmulas electorales. Cristina Elisabet Fernández está buscando precisamente esto, y sería una inigualable torpeza permitirle que marque el paso del proceso.

Enrique Guillermo Avogadro
Abogado


domingo, 19 de mayo de 2019

LA ESCUELA AUSTRÍACA DE ECONOMÍA (2° PARTE)


Toda acción es individual y toda acción es fruto de una decisión, mucho o poco meditada, pero, siempre deliberada que es lo que va a desembocar en una acción, la cual -por definición- solo puede ser individual y humana. 

Por Gabriel Boragina ©

"Muchas de las ideas de los principales economistas austriacos de mediados del siglo XX, tales como Ludwig von Mises y F.A. Hayek están fundadas en las ideas de economistas clásicos tales como Adam Smith y David Hume, o en las de algunas figuras de principios del siglo XX como Knut Wicksell, además de Menger, Böhm-Bawerk y Friedrich von Wieser"
[1]

Confluyen en las vertientes de la Escuela la de los autores clásicos de los cuales aquí solo se dan algunos pocos nombres. Habría que agregar a Edmund Burke, Adam Ferguson, John Locke, Herbert Spencer y varios otros más que, desde posturas más o menos afines, confluyeron en un núcleo de ideas que daría punto inicial a la Escuela Austríaca de Economía. No obstante, se pueden encontrar algunos denominadores comunes en la diversidad de los nombres citados. Y esos puntos coincidentes son la coincidencia de todos ellos en la necesidad de la libertad y la propiedad privada como basamentos de toda economía sin las cuales ninguna economía podría llegar a merecer ese nombre. De todos ellos, Ludwig von Mises es quizás el más enfático a este último respecto.

"Esta diversidad de tradiciones intelectuales en la ciencia económica es todavía más evidente entre los economistas de la Escuela Austriaca en la actualidad, quienes han recibido la influencia de algunas de las figuras más relevantes de la economía contemporánea. Estos incluyen a Armen Alchian, James Buchanan, Ronald Coase, Harold Demsetz, Axel Leijonhufvud, Douglass North, Mancur Olson, Vernon Smith, Gordon Tullock, Leland Yeager y Oliver Williamson, además de Israel Kirzner y Murray Rothbard. Mientras que algunos pueden afirmar que una única Escuela Austriaca de economía opera dentro de la profesión económica en la actualidad, también se podría argumentar con cierta sensatez que el rótulo “austriaco” ya no posee ningún significado sustantivo" [2]

Ciertamente el rótulo "austríaco" ha perdido todo su significado como para designar con precisión los postulados de la escuela, pero resulta ser que ha alcanzado su arraigo a través de una tradición que se mantiene en nuestros días y resulta bastante difícil de erradicar. Máxime si se tiene en cuenta -como bien dice el párrafo - la multiplicidad de aportes que han realizado a la escuela intelectuales que -en principio- son ajenos a la misma o empezaron siéndolo y finalmente terminaron adhiriéndose a sus proposiciones. Algunos autores, como el profesor Alberto Mansueti, han preferido -con acierto a nuestro juicio- utilizar las palabras "escuela austriana" y referirse a sus miembros como "austrianos". De todas maneras, más que de las etiquetas, nos interesa ocuparnos de los contenidos, y en este sentido las contribuciones de todos los mencionados (faltan muchos nombres más, por cierto) son de una importancia y relevancia fundamental.

Veamos seguidamente algunas de las propuestas más relevantes de nuestra escuela:

"Proposición 1: Sólo los individuos eligen. El hombre, con sus propósitos y planes, es el principio de todo análisis económico. Sólo los individuos eligen; las entidades colectivas no hacen elecciones. La tarea principal del análisis económico es hacer inteligible el fenómeno económico, apoyándolo en los propósitos y planes de los individuos. La tarea secundaria de la economía consiste en indagar las consecuencias no intentadas o no previstas que pueden surgir como consecuencia de las elecciones individuales"
[3]

Toda acción es individual y toda acción es fruto de una decisión, mucho o poco meditada, pero, siempre deliberada que es lo que va a desembocar en una acción, la cual -por definición- solo puede ser individual y humana. No hay actos no deliberados ni automáticos en el campo de la acción humana. Aun las conductas más impulsivas han sido fruto de un cierto grado de deliberación sobre la misma. De tal suerte que, no cabe sino metafóricamente hablar de acciones "colectivas" lo cual no es más que una impropiedad, tal como cuando de ordinario se alude a "decisiones" de países, naciones, gobiernos, sociedades, grupos, etc.". Sólo pueden concebirse estas últimas expresiones en un sentido puramente figurado, pero nunca literal. La acción siempre es humana y siempre es individual, no colectiva.

"Proposición 2: El estudio del orden del mercado versa fundamentalmente sobre el comportamiento de intercambio y las instituciones dentro de las cuales tiene lugar el intercambio. El sistema de precios y la economía de mercado se entienden mejor bajo el término “catalaxia”, y la ciencia que estudia el orden de mercado cae bajo el dominio de la “cataláctica”. Estos términos se derivan de la palabra griega katalaxia –que significaba la acción de intercambiar y convertir a un extraño en amigo, como consecuencia del intercambio. La cataláctica centra el análisis en las relaciones de intercambio que surgen en el mercado, la negociación que caracteriza el proceso de intercambio, y el contexto institucional en el que estos intercambios tienen lugar" [4]

En un campo más amplio aún, toda relación social implica acciones de intercambio de todo tipo, pero esos intercambios (que pueden ser, incluso, de ejemplo, afectivo o familiares) adquieren interés para la cataláctica cuando se realizan por un precio, entendido como síntesis del entrecruzamiento de valores dispares que son, en suma, los que motivan a los agentes económicos a intercambiar. Es cuando alcanza sentido entonces esta última locución "agentes económicos". Para que exista cataláctica, entonces, han de haber relaciones de intercambio dentro de un proceso que se denomina de mercado. Los elementos de este proceso se distinguen como de oferta y demanda. Friedrich A. von Hayek ha caracterizado el sistema de precios como un tablero de señales que ofician de guía pare indicar -tanto a compradores como a vendedores- dónde existen escaseces relativas que son -en definitiva- los renglones a los cuales se orientarán los recursos, dando lugar a un mecanismo más: el de inversión.

Sin precios, sin propiedad privada y sin moneda, sencillamente, no hay mercado, y sin mercado no hay economía. Por eso, se dice que constituyen tres pilares fundamentales para la existencia de un verdadero sistema económico.


[1] Peter J. Boettke. *Hacia una Robusta Antropología de la Economía**La Economía Austriaca en 10 Principios* Instituto Acton Argentina. Trad: Mario Šilar

[2] Peter J. Boettke, Ibidem.

[3]Peter J. Boettke, Ibidem.

[4] Peter J. Boettke, Ibidem.


sábado, 18 de mayo de 2019

LA ESCANDALOSA FRUTILLA

"Unirse para defender las democracias, para combatir el fascismo. Si hay necesidad de trabajar más, lo haremos porque, de lo contrario, seremos esclavos"
Francisco Pérez Leirós


Por 
Enrique Guillermo Avogadro

No resulta superfluo recordar las claras amenazas a los jueces y fiscales que avanzaron en los procesos de corrupción que profirió Alberto Fernández, uno de los más notorios camaleones de nuestra política vernácula y virtual jefe de campaña de la ex-Presidente. Porque, si las sumamos a las confesas intenciones de modificar la Constitución para suprimir al Judicial como uno de los poderes del Estado, de expropiar o nacionalizar la banca y el comercio exterior, o de limitar la libertad de prensa, el fantasma de Venezuela se hará más presente en nuestras peores pesadillas.

Las óperas bufas que vimos esta semana -una de ellas fue la foto de la viuda en la sede del Partido Justicialista, en una reunión que ameritaba que la Policía Federal colorara un celular de culata y se llevara a todos los ladrones presentes- permiten afirmar, a un mes del cierre de las listas, que sólo serán favoritos para las elecciones de noviembre Cristina Kirchner y Mauricio Macri; los demás partidos podrán obtener algunas bancas legislativas -su real objetivo- pero, salvo que se produzca algún hecho hoy imprevisible, sus candidatos no participarán del ballotage.

Esos cisnes negros pueden llegar volando desde el exterior, de la mano de un incremento de las hostilidades comerciales entre Estados Unidos y China, de un posible conflicto bélico en el Golfo Pérsico que impida el tránsito normal del petróleo saudí o de cualquier otro episodio que altere aún más la economía mundial y modifique bruscamente las cotizaciones de las divisas o de los commodities.

Pero tampoco puede descartarse que, de producirse algo así, que pueda influir en forma determinante en el proceso eleccionario local, la preocupación de los Estados Unidos y del Brasil ante la probabilidad de un retorno populista a la Argentina, con una mandataria que daría su inmediato apoyo a los criminales regímenes de Nicolás Maduro, en Caracas, y de Miguel Díaz-Canel, en La Habana, y recibiría con los brazos abiertos a Rusia e Irán, pueda transformarse en una ayuda externa aún mayor para la débil economía nacional.

Al menos por el momento, a partir del 21 de este mes, Argentina verá a su segundo ex Presidente sentado en el banquillo de los acusados; y lo digo de ese modo porque, aunque me parezca altamente improbable, Cristina Fernández podría no presentarse, como es su obligación legal. En tal caso, el Tribunal nada podría hacer para obligarla, ya que cuenta con la protección del H° Aguantadero; debería, si la situación se diera, pedir su desafuero y el Senado sería quien lo decidiera.

Qué harían los legisladores del peronismo federal, que comanda Miguel Angel Pichetto, si eso ocurriera es la gran pregunta, que aún no obtiene respuestas; la tentación de entregarla debería ser enorme, pues su retiro de la competencia habilitaría a un candidato propio, de la multitud que hoy pretende encarnarlo en las urnas, a participar por el premio mayor nucleando a todo el "movimiento".

El martes pasado, la escandalosa orden de la Corte Suprema -con la honrosa excepción de su Presidente- para que le fuera remitida la causa que la juzgará y, con ella, algunos de los más conspicuos cómplices que integraron la asociación ilícita que organizó y comandó con su marido muerto, contradijo su propia jurisprudencia, carecía de antecedentes y pretendía consagrar la impunidad de los imputados demorando sine die el comienzo del debate oral.

Una inédita reacción social -múltiples cacerolazos y casi 300.000 firmas en change.org- obligó a los cortesanos a tascar el freno y recular en chancletas (¡genial el tuit de Andrés Malamud: "Ganó Rosenkrantz 1 a 4"), y la prueba más clara de ello fue el melifluo comunicado que emitieron el jueves por la mañana, incluyendo dos casos jurisprudenciales en que había actuado del mismo modo aunque, presumo que sólo por razones de espacio, omitió consignar que en ambos ese pedido de remisión de la causa se había producido después de realizado el juicio, y no antes. De no haberse puesto de pie la ciudadanía, la suspensión del juicio se hubiera concretado y, así, se hubiera convertido en la nefasta frutilla de la torta de corrupción más grande que recuerde la Argentina.

Pero debemos estar atentos y vigilantes, porque nada es definitivo con esta Corte, que se ha reservado el derecho a intervenir más adelante y, por la vía de la aceptación de algún recurso, declarar la nulidad de todo el proceso. Si el ballotage coronara a Cristina, no quedan dudas de que su impunidad estará garantizada, ya que se cancelarán los juicios por obra y gracia de su "Justicia Legítima" y quedarán en libertad todos sus cómplices, funcionarios y empresarios, ahora detenidos o procesados.

Se habrá cumplido así nuestro destino final, ya que llevamos décadas fracasando en nuestros intentos de suicidarnos en masa; no lo hemos logrado hasta ahora porque, como dijo Georges Clemenceau, Canciller de Francia, después de visitar nuestro país en 1910, "Argentina crece gracias a que sus políticos dejan de robar cuando duermen".


Enrique Guillermo Avogadro
Abogado



viernes, 17 de mayo de 2019

IMÁGENES

Me gusta pensar la política a través de imágenes. Tal vez porque siempre tuve presente aquella frase de Albert Camus: “Si quieres pensar dedícate a la literatura, solo se piensa a través de imágenes”. 

Por Rogelio Alaniz 


LAS BABAS DEL DIABLO



Una primera imagen de la semana que pasó: el diputado Enrique Olivares herido de muerte. A su lado, su amigo Miguel Yaddón: jogging blanco y muerto. Los esfuerzos de Olivares para ponerse de pie, los pasos vacilantes como los de un pájaro herido o un muñeco que intenta bailar una danza macabra. Su soledad. Esa soledad infinita de una madrugada que se tiñe con sangre. Ese momento en que un hombre sabe que el rostro de la muerte se hizo presente, que la señora de la guadaña lo invita bailar. El veredón de la plazoleta, más allá la arboleda, más allá la calle, la ciudad, la gente que se desplaza de un lugar a otro. Y en el centro de la imagen un hombre luchando por sobrevivir sin saber exactamente por qué los balazos. La escena es desgarradora. No sé por qué, la cámara me recuerda a esa otra, la de “Las babas del diablo” de Julio Cortázar. Según el punto de vista, siempre hay algo más en la escena. En el caso que nos ocupa hay otras imágenes que se superponen a la de ese hombre que lucha por su vida. Un auto blanco pasa por la calle; la arboleda protege los pasos de otro hombre. Pero lo más chocante es la del canalla que desciende del auto. Baja del auto y mira a los heridos como si fueran “cosas”. Esa indiferencia helada, criminal. Ni un gesto, ni una palabra al hombre que se está muriendo a su lado. El señor se limita a bajar del auto. Camina, se pasea, mira para un lado y otro. La sangre derramada a su alrededor le resulta ajena. Vuelve a abrir la puerta del auto. Del interior sale una persona joven que cruza la avenida. Un minuto veinte se dice que estuvo paseándose por el veredón antes de decidirse subir al auto y salir como si estuviera paseando. Un minuto veinte son ochenta segundos. Una eternidad para el hombre que se está muriendo a su lado. Miserable. Hasta a un perro se lo atiende cuando está herido. Esa indiferencia también puede ser pensada como un síntoma cultural de nuestros tiempos. Alguien se está muriendo a mi lado y no digo ni hago nada. Es más, protejo al criminal porque probablemente yo también sea un criminal o por lo menos un cómplice. Una bicicleta se detiene al lado de Olivares. Ve llegar a un policía y escapa. No vaya a ser cosa que… El policía está preocupado por el muerto, por Yadón. El oficio no le enseñó a mirar en primer lugar la escena, es decir, mirar que a diez metros el o los criminales están arriba del auto. Ese auto que ahora se desplaza hacia un lugar que la cámara ignora…


SANTA CRISTINA



Ese jueves a la noche la Señora presenta un libro, su libro en la Feria del Libro insólitamente privatizada. Un discurso deliberadamente manso a un público decidido a aplaudir no importa lo que diga y con el tono que lo diga. La magia trasladada a la política se relaciona con el servilismo y la obsecuencia. Los que están allí no son militantes, no son políticos, no son artistas, no son ciudadanos. Son feligreses. Algunos de ellos con prontuarios, algunos de ellos añorando tiempos en los que vivían pródigamente del Estado, pero por sobre todas las cosas son feligreses, creyentes de rodillas ante su diosa. Como me dijera una militante kirchnerista: “Rogelio… lo que sentimos por ella es amor… vos nunca vas a poder entender eso… el amor que ella nos inspira”. Y tiene razón. Claro que tiene razón. Jamás voy a poder entenderla. La religión – tal vez la brujería- y la política nunca suelen hacer buenas migas.

La realidad como siempre en estos casos trajina en las afueras del templo. Allí donde el fanatismo deviene en agresión, violencia, sed de sangre; allí donde el fanatismo celebra sus rituales y sus sacrificios. De eso se trata, del sacrificio. La víctima, una periodista. Una mujer. Lo más destacada: su sonrisa. Una sonrisa fresca, espontánea, juvenil; una sonrisa de este mundo para enfrentar a las furias desatadas. ¿Su pecado? Ser periodista; tal vez, trabajar en un lugar donde esa palabra no suele ser bienvenida; ser mujer…eso…una mujer sola. Solo en esas condiciones el rufián que la insulta se anima a ejercer sus bravuconadas con la impunidad del patotero; la impunidad y el anonimato. Y, por supuesto, la cobardía moral.


NIDO DE RATAS


El rostro de Hugo y Pablo Moyano. El rostro como fotografía del alma. Sus bravuconadas, sus insultos. Los Moyano actualizan en tiempo literario el formidable relato de Adolfo Bioy Casares y Jorge Luis Borges: “La fiesta del monstruo”. Cualquier director de cine que quiera filmar una película acerca del matonaje sindical y los barras bravas, hallará en los retratos de los Moyano su escena inspiradora preferida. Algo más: esa misma noche Patricia Bullrich recuerda que el momento más duro de su gestión pública, el momento en el cual sufrió más insultos y amenazas, fue cuando se le ocurrió que los dirigentes sindicales debían hacer una declaración jurada de sus bienes. Los argentinos nunca nos vamos a terminar de arrepentir que la llamada “Ley Mucci”, la legislación de democratización de los sindicatos propuesta por Alfonsín al momento de asumir la presidencia de la nación haya sido rechazada por los senadores peronistas.


SANTA EVITA


Fernando Vallejo, autor de “La virgen de los sicarios”, termina de ser plagiado. Los responsables del operativo son nuestros muchachos de la CGT proponiendo la beatificación de Eva Duarte de Perón. Santa Evita -si el compañero Bergoglio da lugar- dejará de ser el título de un libro de Tomás Eloy Martínez, para hacerse realidad. Realidad religiosa. No soy creyente en los términos que los compañeros Bergoglio y Grabois exigen para los hombres de fe y, por lo tanto, digo que me da exactamente lo mismo que la iglesia católica declare al “Hada Rubia” santa, virgen o lo que más le guste. Allá ellos con sus santorales y sus celebraciones. Sí me importa confirmar –por si alguna duda había- que para los peronistas Evita no es un hecho político sino religioso. Ahora entiendo por qué resulta imposible debatir sobre la vida real de la creadora de la fundación privada que llevaba su nombre y que se financiaba con los recursos del estado y la extorsión mafiosa a empresarios. Nunca olvidarlo en esta argentina mágica y populista: a un político, hombre o mujer, se lo interpela, se lo apoya o se lo critica; a una santa, no. A un político se le exigen decisiones, a una santa se le piden milagros; a un político se le discute, a una santa se le reza. Los muchachos de la CGT no compiten con Macri, compiten con el Gauchito Gil y la Difunta Correa.


KAFKA Y LOS SEÑORES DE LA CORTE



Jorge Luis Borges postula que el tema central de la obra de Franz Kafka es la infinita postergación. Josef K deambula por tribunales en ruinas convocado por una causa que no conoce hasta ser finalmente ejecutado ignorando el motivo y la identidad de los jueces. El Agrimensor no logra ingresar al castillo; al mensajero de un emperador chino le resulta imposible llegar a su destino; dos amigos jamás pueden juntarse; la construcción de la muralla china se presenta como infinita. Si las reflexiones de Borges son certeras, la Corte Suprema de Justicia es insólitamente kafkiana. Tema central: la postergación infinita. Lo interesante es el empecinamiento de nuestros jueces en reiterar sus decisiones. La postergación infinita ya la aplicaron con Carlos Saúl Menem. Ahora “la historia vuelve a repetirse”. Pregunta para iniciados: ¿Quién es Josef K, quién es el Agrimensor, quién es Gregorio Samsa? ¿Los compañeros Lorenzetti, Maqueda o Rosatti?