También habitan Comodoro Py, pero son menos “famosos” que sus colegas de primera instancia.
Por Cecilia Devanna
Son los otros jueces federales de los tribunales de Comodoro Py. Dueños de un perfil bajo, desacostumbrados a las cámaras y las polémicas. Sin embargo, tienen el poder real de condenar o absolver a los funcionarios acusados por casos de corrupción. Ellos también marcan la agenda de este año electoral. El viernes, los jueces de los tribunales orales volvieron a ser noticia: sobreseyeron al ex vicepresidente Amado Boudou en el juicio por los papeles truchos de un auto. En lo que queda del año, otros juicios orales los pondrán en la mira. Ciccone y la responsabilidad de Julio De Vido en la tragedia de Once serán de los procesos más calientes.
“Fijando o no un comienzo de juicio, un tribunal marca la agenda política y mediática”, sostuvo una fuente de Comodoro Py a PERFIL. Jueces subrogantes, denunciados ante el Consejo de la Magistratura y otros designados en medio de versiones, marcan el ritmo del 6° piso del edificio de Retiro.
En ese universo, el tribunal que más cuestionamientos despierta es el del número 5, en el que dos de sus integrantes, Oscar Hergott y Daniel Obligado, son los únicos jueces de esta instancia de Comodoro Py denunciados ante el Consejo de la Magistratura, el órgano que elige y controla a los jueces.
En ese universo, el tribunal que más cuestionamientos despierta es el del número 5, en el que dos de sus integrantes, Oscar Hergott y Daniel Obligado, son los únicos jueces de esta instancia de Comodoro Py denunciados ante el Consejo de la Magistratura, el órgano que elige y controla a los jueces.
En el caso de Hergott fue denunciado por sus pares, Obligado e Ivana Palliotti por acoso laboral y violencia de género.
A su vez, Obligado, ligado al radicalismo, enfrenta denuncias de dos defensores. El 5 es uno de los tribunales más atrasados porque juzga desde hace más de 4 años la megacausa ESMA. Recientemente postergaron para 2019 el juicio por escuchas ilegales, que expone uno de los costados de la familia de Mauricio Macri.
El tribunal número 1, que el viernes absolvió a Boudou, juzgará las presuntas irregularidades en el Plan Qunita, que involucra a Aníbal Fernández, entre otros ex funcionarios. Considerado de corte más bien garantista, este tribunal tiene en su conformación a José Antonio Michilini, que llegó al cargo en 2015, elegido por CFK. Ya se sabía que ese tribunal iba a juzgar a Boudou. Aunque también se señala a Adrián Grünberg, otro de los jueces, que por su cercanía a Justicia Legítima, en Py coinciden que es un tribunal que “no se deja influenciar por lo político”.
El número 4, que deberá juzgar a Julio De Vido por Once, y el caso Ciccone, que compromete a Boudou, fue uno de los que juzgó más causas de corrupción menemista. Está compuesto por Néstor Costabel, Pablo Bertuzzi y María Gabriela López Iñíguez, ex jueza de la Ciudad. Quienes conocen de cerca la actividad del 4 consideran que desde su llegada, pasó de ser “más duro a más blando” en sus decisiones. Este año, dilataron la captura de tres condenados por tráfico y efedrina y uno de ellos sigue prófugo.
El número 2 es considerado uno de los tribunales de más bajo perfil. Entre 2014 y 2015 juzgó la tragedia de Once, condenó, entre otros, a Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, y ordenó investigar a De Vido. Actualmente, parte de este tribunal, juzga el encubrimiento del atentado a la AMIA. También de perfil bajo, el número 6 juzga a Luis D’ Elía por la toma de la comisaría de La Boca, y en poco tiempo hará lo propio con Ricardo Jaime, por enriquecimiento.
El tribunal número 1, que el viernes absolvió a Boudou, juzgará las presuntas irregularidades en el Plan Qunita, que involucra a Aníbal Fernández, entre otros ex funcionarios. Considerado de corte más bien garantista, este tribunal tiene en su conformación a José Antonio Michilini, que llegó al cargo en 2015, elegido por CFK. Ya se sabía que ese tribunal iba a juzgar a Boudou. Aunque también se señala a Adrián Grünberg, otro de los jueces, que por su cercanía a Justicia Legítima, en Py coinciden que es un tribunal que “no se deja influenciar por lo político”.
El número 4, que deberá juzgar a Julio De Vido por Once, y el caso Ciccone, que compromete a Boudou, fue uno de los que juzgó más causas de corrupción menemista. Está compuesto por Néstor Costabel, Pablo Bertuzzi y María Gabriela López Iñíguez, ex jueza de la Ciudad. Quienes conocen de cerca la actividad del 4 consideran que desde su llegada, pasó de ser “más duro a más blando” en sus decisiones. Este año, dilataron la captura de tres condenados por tráfico y efedrina y uno de ellos sigue prófugo.
El número 2 es considerado uno de los tribunales de más bajo perfil. Entre 2014 y 2015 juzgó la tragedia de Once, condenó, entre otros, a Juan Pablo Schiavi y Ricardo Jaime, y ordenó investigar a De Vido. Actualmente, parte de este tribunal, juzga el encubrimiento del atentado a la AMIA. También de perfil bajo, el número 6 juzga a Luis D’ Elía por la toma de la comisaría de La Boca, y en poco tiempo hará lo propio con Ricardo Jaime, por enriquecimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario