martes, 14 de julio de 2009

Concordia

El gesto noble del adversario de ayer contrasta con la indigna actitud de generales que olvidaron a sus compañeros de trinchera y claudicaron ante las prebendas de los mercaderes del odio y los vendedores de memoria.

En el penal de Campo de Mayo, un miércoles distinto.
El coronel Horacio Losito y el mayor Ernesto Barreiro, presos políticos del régimen, esperan ansiosos una visita especial. Este 8 de julio, un enemigo de ayer tomó la iniciativa y, sin odios ni rencores, concurrió al penal a brindar un reconocimiento de combatiente a combatiente.
Para Luis Labraña (ex cuadro de las FAR-FAP y Montoneros), esta guerra inconclusa debería terminar y, como dijera en la presentación del libro Volver a Matar, de Juan B. Yofre, "o estamos todos libres o vamos todos presos".
El no fue sólo un "joven idealista"; tenía ideales, "pensó diferente", actuó en consecuencia y tomó las armas. Luego, cárcel y exilio. Y hoy, sin reservas y con la misma disposición de entonces para enfrentar la realidad, se presenta frente a sus otrora enemigos y estrecha sus manos, conmovido ante un cautiverio injusto.
En el instituto penal de Campo de Mayo fuimos testigos y compartimos la misma mesa con ellos y el teniente coronel Emilio Nani. No nos reprochamos el pasado, sí nos compromete un futuro con justicia y paz.
El gesto noble del adversario de ayer contrasta con la indigna actitud de generales que olvidaron a sus compañeros de trinchera y claudicaron ante las prebendas de los mercaderes del odio y los vendedores de memoria.

Arq. Liliana Raffo de Fernández Cutiellos (arquilira@hotmail.com) y
Lic. Jorge P. Mones Ruiz, ex Mayor de Caballería (jorgemonesruiz@yahoo.com.ar).

Buenos Aires

Regresar a PyD

Contáctenos: politicaydesarrollo@gmail.com

No hay comentarios: